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Rosas blancas para el día de las madres

Tabla de contenidos

Los ramos de rosas blancas son desde siempre un bonito símbolo de pureza. Y si un amor es puro de verdad ese es el de una madre, por eso son tan adecuados para regalar en una fecha tan importante como la del día de la madre.

Las rosas blancas son originales y diferentes a las que se reciben habitualmente y hablan de sentimientos profundos y delicados. Un ramo con una bonita composición de rosas es ideal para regalar a una madre en este día, aunque también se puede optar por regalar una única flor como un pequeño detalle para acompañar a otro regalo.

Una rosa única en blanco es también un detalle muy especial para regalar a una madre por parte de un hijo que todavía no tiene ingresos y no dispone de fondos para poder hacer un regalo más importante. La madre lo agradecerá y seguro que se emocionará con el detalle.

Las rosas siempre son flores adecuadas

Las rosas siempre son la elección adecuada para regalar flores a una madre. Son bonitas, elegantes, flores con mucha clase pero también con una gran sensibilidad. Las rosas gustan a todo el mundo porque son flores que representan la perfección y la feminidad. Parecen tener el poder de hacernos sentir bien cada vez que las recibimos.

Seguramente, a tu madre le encante recibir flores y las rosas sean unas de sus favoritas. Como también tienen cierto componente formal, son muy adecuadas para ocasiones tan importantes como el regalo del día de la madre. Le gustará recibirlas si se las envías a casa o a su trabajo pero, sobre todo, le encantará si se las puedes llevar tú en persona para compartir ese día con ella.

No olvides que van a ser muchas las personas que quieran obsequiar a sus mamás con bonitas flores, por lo que lo mejor es que las encargues con antelación para asegurarte así de que las tendrás para el día señalado y que el ramo que más te gusta va a esta a tu disposición. Seguramente tu madre te habrá dicho más de una vez que no hay que dejar las cosas para el último momento y esta es una buena ocasión para hacerle caso.

¿Qué color le gustará más a tu madre?

Si eres un buen hijo o una buena hija seguro que sabes cuál es el color favorito de tu madre. Por tanto, si no eres muy amante del blanco sabrás escoger una buena alternativa para ella. No te olvides que en un día así y siendo tu madre la mujer a la que le estás regalando rosas, no hay por qué tener en cuenta ni el significado de los colores ni el significado numérico de los ramos, sino tan solo escoger el que creas que le hará más ilusión.

Si tu madre es una clásica quizás prefiera un ramo de rosas rojo, el tono de toda la vida y el que todos asociamos a estas flores. Si es muy delicada y sensible puede que le guste el rosa y si es una mujer moderna y muy enérgica puede querer toda la inyección de vitalidad que da el amarillo. Incluso hay madres que van más allá y disfrutan con las rosas con colores de fantasía como el azul o el negro o con las arcoiris, perfecto si tu mamá es una mujer repleta de imaginación y de vida interior.

No nos cabe ninguna duda de que sea cual sea el color que escojas, a tu madre siempre le va a gustar porque es un regalo que tú le estás haciendo y ya solo por eso le llegará directamente al corazón.

No te olvides de tu suegra

Hay suegras que son como una segunda madre. Te acogen en su casa como a uno más de la familia, te invitan a que participes en las tomas de decisiones familiares, no dudan en echarte una mano cuando hace falta… Muchas veces nos ayudan más que la propia familia porque están más cerca o porque, simplemente, son más dispuestas o disponen de más tiempo.

El mito de la suegra está tan extendido que parece que tenemos que aclarar o justificar cuando nos llevamos bien con la nuestra, cuando eso debería de ser lo más normal del mundo y no la excepción a la norma. ¿Te llevas bien con tu suegra? Pues presume de ello sin complejos con un bonito regalo en el día de la madre.

Por eso, en el día de la madre, no olvides comprarle a tu suegra un bonito ramo de rosas para darle las gracias por estar siempre ahí y por hacerte sentir parte de la familia. A fin de cuentas, ella te ha dado el regalo más bonito, a tu pareja. Sin ella, tu propia familia no habría tenido lugar así que se merece un reconocimiento por tu parte.