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Cómo celebrar San Valentín

Tabla de contenidos

El primer San Valentín suele ser el más especial. La pareja no lleva más que unos meses junta y están en esa etapa en la que el amor es como un huracán que parece arrasarlo todo a su paso. Por eso, la pregunta es ¿cuál es el regalo adecuado? Para este caso recomendamos las rosas eternas por todo lo que simbolizan.

Muchas personas creen que este tipo de flores son muy caras, pero cuando saben cuanto vale una rosa eterna y cuanto tiempo puede durar se dan cuenta de que es el regalo perfecto para el primer San Valentín. El simbolismo de las rosas eternas está muy unido al día de los enamorados y ya hemos hablado con anterioridad de ellas en nuestro blog. Te invitamos a pinchar aquí para descubrir toda su historia.

La celebración va a depender mucho del tipo de pareja que seáis, pero si quieres acertar, una cena romántica es siempre una apuesta segura. Pero si quieres que la cena sea realmente especial, puedes regalarle una experiencia. Hablamos de los famosos cofres de regalo que incluyen la cena y una estancia en un hotel o la cena y una sesión de spa, por ejemplo. Un regalo completo que hará que el día sea mucho más inolvidable y que podáis disfrutar de vuestro primer día de San Valentín creando un gran recuerdo para toda la vida.

Cómo celebrar San Valentín cuando hay niños

Este año San Valentín cae en jueves, lo que hace un poco más complicado que las parejas con niños puedan celebrar una romántica velada. Los peques tienen clase al día siguiente, hay que trabajar y dejarlos en casa de un familiar no suele ser la mejor de las opciones entre semana.

En este caso hay dos maneras de plantearse la celebración. Si se quiere que sea algo romántico y muy íntimo no queda otra que contratar a una persona de confianza para que quede con los niños. Puede ser durante unas horas, lo suficiente para ir a cenar y tener rato romántico a solas con la pareja, o durante toda la noche. En este caso, se puede coger una bonita habitación de hotel para pasar la noche y volver a casa por la mañana a tiempo para llevar al niño al colegio. Somnolientos, sí, pero felices.

La otra opción es, ¿por qué no? Integrar a los niños en la celebración de San Valentín. A fin de cuentas, ellos son el fruto del amor que une a la pareja y son parte importante en la relación. Seguro que a tu hijo o hijos les encanta ir contigo a elegir un regalo para papá o para mamá, por ejemplo llevarlos para elegir una bonita rosa bella y bestia comprar la flor y también unos dulces.

Esta flor de película es fácilmente identificable por los más pequeños de la casa, que disfrutarán no solo comprándola, sino también siendo ellos los que entreguen el regalo. Se puede organizar una bonita merienda de San Valentín en casa con algunos dulces, con tarjetas hechas en familia y con intercambio de muchos mimos.

Más tarde, una vez que los niños estén en cama, los papás podrán tener una cena a solas, que si bien no será tan romántica como la que podrían tener en un bonito restaurante puede ser igual de íntima y agradable tras pasar una tarde muy especial en familia.

Cómo celebrar San Valentín cuando se está lejos

Cuando la pareja está lejos San Valentín puede parecer una fecha triste porque no se podrá estar junto a la persona que se quiere. Pero hoy hay muchas facilidades para conseguir que las cosas puedan ser igualmente bonitas y románticas dentro de los límites que marcan las distancias.

Comienza por comprar rosa encantada bella y bestia para tu pareja y envíasela junto con una invitación para cenar. Sí, estáis lejos, pero programas como Skype pueden hacer que estéis un poco más cerca. Pon la hora y, si quieres, alguna petición especial, como por ejemplo que no falte una copita de cava.

A la hora señalada conecta el ordenador o la videoconferencia y podréis estar juntos y charlar mientras cenáis. Por supuesto, además de la rosa encantada comprar algún dulce para que la velada sea mucho más acorde a la fecha. Un brindis por vuestro amor puede ser el broche final a una cita un poco diferente a las habituales pero igualmente agradable.

Si ambos vivís en ciudades con aeropuerto, la distancia puede no ser más que un par de horas de vuelo, si tienes la posibilidad, puedes sorprender a tu pareja aunque sea con una visita de tan solo unas horas. Esta idea es especialmente importante si es vuestro primer San Valentín y sabes que la persona a la que quieres es muy romántica y le da mucha importancia a este tipo de fechas.